Felipe V y una estatua perdida
Nieto de Luis XIV de Francia, Felipe V de Borbón (1683-1746), ya duque de Anjou, ascendió al trono de España en 1700, por cuenta de la relación más directa con el difunto soberano Carlos II. Sin embargo, no fue hasta las paces de Utrecht (1713) y Rastadt (1714), que pusieron fin a la Guerra de Sucesión española (1701-1713), cuando vio definitivamente reconocidos sus derechos, a cambio de renunciar a una gran parte de las antiguas posesiones de los Habsburgo, en particular, de los territorios italianos y los Países Bajos meridionales. Después de dejar durante unos meses del año 1724 el gobierno en manos de su hijo mayor, Luis, después muerto de viruela, Felipe regresó al trono y se empeñó, en los años siguientes, en recuperar los territorios perdidos tomando parte en la Guerra de Sucesión polaca (1733-1738) y en la Guerra de Sucesión austriaca (1741-1748). Así fueron recuperados los reinos de Sicilia y Nápoles (Tratado de Viena de 1738). En política interior, Felipe V y sus ministros se comprometieron a imponer en el reino una serie de reformas, empezando por los decretos de Nueva Planta, publicados en 1707. Éstos cancelaron las consolidadas autonomías locales, cambiando significativamente la relación entre Madrid y las provincias: se abolieron los reinos de Aragón, Valencia, Mallorca y sus respectivas asambleas, las cortes, mientras que se establecieron los municipios, y la figura del alcalde. A nivel central, también se eliminaron los consejos de Aragón, de Italia y Flandes y nacieron las Secretarías de Estado, compuestas por funcionarios nombrados por el Rey y coordinadas por el Secretario de Estado. Otras reformas importantes repercutieron en el sistema fiscal, la educación y el ejército.
Una estatua ecuestre que representa a Felipe V fue realizada al inicio de su largo reinado, entre 1702-1703, por el escultor napolitano Lorenzo VaccaroEscultor, arquitecto y pintor napolitano, Lorenzo Vaccaro (1655 ca.-1706) tomó como modelo a Cosimo Fanzago. Destacado personaje de la Nápoles tardo barroca, estuvo influenciado también por Bernini y por Solimena. Después de él, comenzó a trabajar su hijo, también artista, Domenico Antonio.. La estatua, que se encontraba en la Piazza del Gesù Nuevo, sin embargo, fue demolida en 1707, con la entrada de los austriacos en la ciudad de Nápoles. Un modelo en miniatura de la estatua, adquirida en Madrid en 1705 por el duque de Puebla, se conserva ahora en el Museo del Prado. El rey está representado bajo la forma de un general romano que desfilaba ante el aparato triunfal realizado en su honor. En 1780, Carlos III convocó un concurso para la creación de una estatua ecuestre que representase a su padre Felipe V y pudiese ser colocada, a imitación de los monarcas Habsburgo, en alguna plaza de Madrid. Aunque este proyecto no se llevó a cabo jamás, la Academia de Bellas Artes de San Fernando en Madrid aún conserva algunos de los modelos presentados para el concurso.