Los Países Bajos

El conjunto de territorios conocidos como los Países Bajos perteneció en el siglo XV al ducado de Borgoña. En la corte borgoñona, abierta a las influencias humanísticas, nació el primer códice de etiqueta cortesana, que en poco tiempo se difundió por las principales cortes europeas. A la muerte del último duque, Carlos el Temerario (1433-1477), los Países Bajos pasaron a formar parte de los dominios de los Habsburgo, con motivo del matrimonio de María, hija de Carlos, y el Archiduque Maximiliano I. La estructura territorial variada, compuesta por provincias de distintas lenguas, sistemas políticos y sistemas económicos, conoció un período de riqueza y expansión durante el siglo XVI. Felipe el Hermoso (1478-1506) y Carlos V (1500-1558) trataron de conseguir el apoyo de los dirigentes locales y los establecieron en los dominios de los Habsburgo. Después de su partida (1517), Carlos dejó como gobernadores primero a su tía Margarita y luego a su hermana María. Su hijo, Felipe II (1527-1598) no trató a los Países Bajos con el mismo respeto que su padre, siendo considerado por sus súbditos como un soberano extranjero. Una recesión económica, sumada al descontento de la aristocracia local excluidos de los oficios de poder y el problema religioso derivado de la presencia de una creciente comunidad de hugonotes, fueron el origen del estallido de la revuelta de los Países Bajos y de una guerra que duraría ochenta años (1568-1648), sin que los Habsburgo fueran capaces de recuperar el control del territorio. Después de la Tregua de los Doce Años (1609-1621) la guerra se reanudó dentro del marco del conflicto más general conocido como la Guerra de los Treinta Años (1618-1648). Con la Paz de Westfalia (1648) las siete provincias unidas se independizaron de la Monarquía Habsbúrguica, separándose de las otras provincias del sur. Convertida en una potencia colonial y comercial líder, las Provincias Unidas se enfrentaron en varias ocasiones a Inglaterra en la segunda mitad del siglo XVII, hasta que Guillermo III de Orange fue llamado al trono de Inglaterra en 1688.

Para saber más:

• S. Schama, The Embarassment of Riches. An Interpretation of Dutch Culture in the Golden Age, Los Ángeles 1988.
• J.I. Israel, The Dutch Republic. Its Rise, Greatness and Fall, 1477-1806, Oxford 1998.