La Real Maestranza de Caltanissetta
La Maestranza de Caltanissetta nació de la unión de los gremios, formados por artesanos y profesionales que trabajaban en el mismo oficio. Además de realizar tareas de la vida económica y de asistencia (en beneficio de sus miembros y sus familias), en el pasado, estas agrupaciones también se ocuparon de cargos de seguridad pública. Hoy, sin embargo, la Maestranza se dedica principalmente a la organización de importantes ceremonias paralitúrgicas (una función que normalmente es llevada a cabo por las cofradías religiosas en otros lugares). Como estas últimas, las agrupaciones de artesanos tienen un espacio religioso (una iglesia, una capilla o un oratorio) y un santo patrón de referencia, cuya efigie se reproduce en su emblema. En el vértice superior de la Maestranza está su capitán, elegido anualmente por los miembros de las corporaciones participantes. Estas últimas, al mismo tiempo, eligen entre los miembros que pertenecen al mismo gremio que el Capitán temporal, el resto de personajes importantes que deben ocupar en la Maestranza: el escudero, el obispo mayor, el abanderado y los alabarderos (una nomenclatura que proviene de la antigua configuración militar de la agrupación de Caltanissetta). En Málaga, todavía hoy, a su homólogo, con motivo de la Pascua, se le reconoce el derecho de liberar a un condenado por delitos menores: lo mismo sucedió en Caltanissetta hasta 1822. El capitán es el protagonista absoluto de la primera ceremonia del Miércoles Santo, que culmina con la procesión solemne de la Real Maestranza, acompañando al Santísimo Sacramento.
Durante la santa procesión de Jueves Santo, tres gremios pertenecientes a la Real Maestranza participan en la procesión con sus respectivas Vare: los panaderos con la Última Cena, los escultores con la Primera Caída y los albañiles con el Traslado. El Viernes Santo, sin embargo, los artesanos de Caltanissetta participan en la procesión del Señor de la ciudad, custodiando el espléndido y antiquísimo crucifijo negro de Caltanissetta. El Domingo de Resurrección, la Real Maestranza acompaña al obispo y a su capitán a la Catedral para la Misa de Pascua. Desde hace varios años, la Maestranza (de la que forman parte unos cuatrocientos artesanos) ha vuelto a custodiar, como lo hizo una vez, también la procesión del Patrón San Miguel Arcángel y el desfile del Corpus Domini.