PhD Program in Historical studies
Otros restos de la Lecce barroca
El rostro barroco de Lecce, dominado por las obras anheladas por sus obispos y realizadas por sus arquitectos más famosos, se complementa con otros elementos y características que contribuyen a reconstruir el aspecto de la ciudad durante los siglos XVI y XVII.
La presencia del poder español, que controló el virreinato de Nápoles, del que formaba parte Lecce, durante más de doscientos años, ha sido testigo del Arco de Triunfo de Porta Napoli, construido en 1548 en honor a Carlos V, y del castillo, erigido entre 1539 y 1549 por orden del propio emperador. Esta última estructura, casi de forma cuadrada con baluartes en los ángulos, presenta en su interior una capilla de la primera mitad del siglo XVIII, con un altar barroco.
La presencia de las Órdenes religiosas, con las que a menudo tuvo que enfrentarse el obispo Pappacoda, se demuestra a través de la persistencia de sus iglesias y sus sedes o casas. La Iglesia del Gesù, también conocida como della Madonna del Buon Consiglio, fue la sede de la Compañía de Jesús durante siglos. Fue construida a partir de 1575 en el emplazamiento de una antigua iglesia de culto greco-ortodoxo, y está inspirada en el modelo de la Iglesia del Gesù de Roma, presentando una fachada sobria y lineal, que consta de dos órdenes. En la parte inferior, en el interior del tímpano partido encima del portal, está el emblema de la Compañía adorada por dos ángeles. En la parte superior, dos ventanas laterales flanquean la gran ventana central coronada por una hornacina con la estatua del Niño Jesús, mientras que en la parte superior de la fachada domina la escultura del PelícanoEn Heráldica el pelícano era representado mientras se desgarraba el pecho para nutrir a sus crías (pelicano con su piedad), y como tal es símbolo de piedad, amor y caridad hacia el prójimo.. El interior cuenta con un fresco del Martirio di Sant’Irene, el lienzo de la Circoncisione di Gesù, el altar mayor atribuido a Giuseppe Cino y el altar dedicado a San Bernardino RealinoBernardino Realino (1530-1616) nació en Carpi, y después de licenciarse en leyes y de una breve carrera política, entró al servicio del virrey de Sicilia Francisco Fernando de Ávalos. Se transfirió a Nápoles, ingresando en la Compañía de Jesús, prestando servicio en Lecce, la ciudad donde vivió hasta su muerte. Fue canonizado por Pío XII en 1947. Sus restos se conservan en la Iglesia del Gesù de la capital salentina., cuyos restos mortales están albergados en el mismo altar.
La iglesia dedicada a Santa Irene, patrona de Lecce hasta 1656, da testimonio de la presencia e influencia en la ciudad de la Orden de los Teatinos. Los trabajos de construcción comenzaron en 1591 sobre un proyecto del P. Francesco GrimaldiFrancesco Grimaldi (1543-1613) fue un religioso italiano, miembro de la Orden de los Clérigos Regulares Teatinos. Es conocido por su actividad como arquitecto, en particular en Nápoles, donde contribuyó al desarrollo del arte barroco. Entre sus obras destaca el complejo de la Santissima Trinità delle Monache, la Iglesia de Santa Marea della Sapienza y la Basílica de Santa Maria degli Angeli en Pizzofalcone. y se terminaron en 1639. La fachada es de doble orden, el centro del portal inferior está coronado por una estatua de Santa Irene, obra del siglo XVIII de Mauro ManieriMauro Manieri (1687-1743/44) fue un arquitecto de Lecce, exponente de la gran época barroca vivida por la ciudad salentina. Entre sus obras, destacan el Seminario Arzobispal de Brindisi, la Iglesia de Santa Irene en Lecce y la fachada de la catedral de San Cataldo en Taranto.. En el centro del frontón triangular que corona la fachada hay señales de la Orden de los Teatinos, mientras que sobre el entablamento se puede leer el grabado Irene virgini et martiri. En el interior, es famosa la pintura que representa Il Trasporto dell’Arca (El transporte del Arca), obra maestra de Oronzo TisoOronzo Tiso (1726-1800) fue un pintor de Lecce, de los últimos del Barroco. Discípulo de Solimena, fue muy activo en su ciudad natal y en el Salento. Entre sus pinturas más célebres de Lecce, destacan las que decoran la Catedra (l’Assunta, Il Sacrificio di Noè dopo il diluvio e Il Sacrificio del profeta Elia), la Basílica di Santa Croce (Sant’Antonio da Padova) y la Iglesia de Santa Irene (Il Trasporto dell’Arca Santa)..
También son de admirar, en una ruta por la ciudad barroca de Lecce, la Iglesia delle Grazie (segunda mitad del siglo XVI), la Iglesia de San Mateo (segunda mitad del siglo XVII) y la Porta Rudiae, reconstruida en su forma actual en 1703 y coronada en su parte central con una estatua de San Oronzo, el patrón admirado por el obispo Pappacoda.